Foto: Cadenagramonte.Madrid, 8 oct.- Decenas de miles de personas salieron este sábado a las calles de las principales ciudades de España para exigir a la clase política diálogo y negociación ante el grave conflicto secesionista en Cataluña.
Convocadas de manera espontánea a través de las redes sociales por el recién creado movimiento cívico Hablamos/Parlem (Hablamos en catalán), las concentraciones tuvieron lugar frente a los ayuntamientos de numerosas urbes.
En las más multitudinarias, registradas en Madrid y Barcelona, miles de ciudadanos vestidos de blanco y sin banderas reclamaron sensatez y cordura al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y a su par catalán, Carles Puigdemont.
“Los gobernantes no pueden seguir por este camino, porque nos están dividiendo y envolviendo en banderas para hacernos chocar”, algo que este país no merece, subrayó Guillermo Fernández, uno de los promotores de la iniciativa.
Según su criterio, la ciudadanía está mostrando más sentido común que sus dirigentes, a quienes demandó diálogo una y mil veces para encontrar una solución a la crisis territorial en Cataluña, que el pasado domingo celebró un referendo unilateral para separarse de este país.
Volveremos a salir hasta que se sienten, porque tenemos muchas cosas en común y queremos convivencia y no odio, enfatizó Fernández, investigador de la Universidad Complutense de Madrid.
Congregados en la plaza de Cibeles, frente al ayuntamiento de esta capital, los manifestantes exhibieron pancartas con las palabras Hablemos o Sin banderas y corearon consignas como España es mejor que sus gobernantes, o Carles, Mariano, a ver si nos llamamos.
“La calle nos lo pide. Estemos a la altura, estamos a tiempo”, afirmó en un mensaje en Twitter el secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Pedro Sánchez.
En la propia red social, Pablo Iglesias, líder de la agrupación de izquierda Podemos, escribió: “La gente es mejor que sus gobernantes. Siento orgullo y esperanza viendo Madrid así ahora mismo”.
Una imagen similar a la de Cibeles se repitió en la plaza Sant Jaume de Barcelona, presidida -frente a frente- por el consistorio barcelonés y la sede de la Generalitat (gobierno catalán), en la cual se reunieron miles de personas en defensa de una solución pactada.
Estas protestas pacíficas se producen en un contexto de presión a Puigdemont para que renuncie a su plan de declarar unilateralmente la independencia, y de insistentes llamados a Rajoy a buscar una salida pacífica y negociada al diferendo.
“Es hora de estar juntos para mostrarles que han sido incapaces e irresponsables y que existe otro modo de hacer las cosas”, expresó en un manifiesto la plataforma ciudadana Hablamos. (Cadenagamonte)
