Sierra de Cubitas,10 abril.- Ya hace 63 años que las madres que dedican horas de labor en centros de trabajo se van sin preocupaciones porque marchan confiadas que dejan en buenas manos a sus hijos.
Y es que son ellas, las educadoras, maestras y auxiliares de los círculos infantiles quienes entregan ese amor, cariño y respeto que harán de los infantes las maravillas soñadas por mamá, papá, tíos y abuelos.
Dormir en catres, comer sin ayuda de los adultos, abrocharse los zapatos, y aprender otras cuestiones elementales que dan cierto grado de independencia, constituyen acciones importantes que los pequeños aprenden en estos espacios, que fortalecen cada vez más con un personal calificado.
Los círculos infantiles nacieron el 10 de abril de 1961 y son unas de las obras más hermosas y perdurables de la Revolución, con un gran sentido humano, pues no solo coadyuvaron a la educación de los pequeños desde edades tempranas, sino que favorecieron la incorporación de las mujeres a la vida laboral.
Su máximo impulsor fue el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien le dio la tarea a Vilma Espín. Como obra genuina de la Revolución, estas instalaciones llegaron para quedarse y mucho hay que agradecerles, ya que a pesar de los duros momentos vividos en el país jamás cerraron sus puertas para educar a los niños desde las edades tempranas.
Segura estoy que muchos en uno de esos salones, en sus juegos de roles, se interesaron por los constructores, los médico, el maestro o el periodista hoy muchos se ven ejerciendo esa profesión.
Entonces, felicidades, al personal pasado, presente y futuro de los Círculos Infantiles. Agradecidos por formar parte de la familia y gracias por la ayuda brindada a la formación de valores y vocación de los niños y niñas que por allí transitan. (Colaboración de Odalis Paneque Especialista en Comunicación de Radio Cubitas)
