Foto: PLBruselas, 23 nov.- El ministro cubano de Cultura, Alpidio Alonso, cumplió esta semana una amplia agenda de trabajo en Bélgica, donde dialogó sobre cooperación con autoridades locales y europeas, así como parlamentarios.
El también diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular conversó el jueves con el ministro-presidente de la Región Bruselas Capital, Rudi Vervoort, y el vicepresidente del Parlamento de Bruselas, Guy Vanhengel, en un encuentro calificado de fraternal.
Las partes manifestaron satisfacción por el intercambio cultural existente y abordaron las posibilidades de ampliarlo como una vía para el acercamiento entre ambos pueblos.
Al respecto, Alonso agradeció el apoyo y la receptividad y propuso firmar un nuevo programa de cooperación que profundice las relaciones actuales.
Asimismo, expuso a los anfitriones el duro contexto en el cual la isla apuesta por su desarrollo socio-económico, marcado por el bloqueo estadounidense, y en particular una de las recientes acciones para su recrudecimiento por Washington, la activación del título III de la Ley Helms-Burton, que busca privar al país caribeño de inversión extranjera.
En esta capital, el visitante fue recibido por Henriette Geiger, jefa de la Dirección de Desarrollo Humano y de la Sociedad, del ente de Cooperación Internacional y Desarrollo de la Comisión Europea.
La contribución de la cultura al desarrollo estuvo entre los temas centrales de la reunión, en la que Alonso reconoció el respaldo de la Unión Europea a proyectos culturales en Cuba, con iniciativas como la acordada en septiembre, con alcance en la región del Caribe.
El ministro aprovechó los intercambios de criterio durante su presencia en Bélgica, en los cuales estuvo acompañado por la embajadora cubana Norma Goicochea, para invitar a sus interlocutores a visitar la mayor de las Antillas, en un momento que las partes consideraron oportuno, al cumplir hace apenas unos días La Habana 500 años de fundada.
Antes de su llegada a suelo belga, Alonso realizó el miércoles una visita de trabajo a Luxemburgo, a donde arribó procedente de Francia.
En París, participó en la 40 sesión de la Conferencia General de la Unesco, foro en el que denunció el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la isla desde hace seis décadas, condenó el golpe de Estado en Bolivia y destacó el papel de la cultura como instrumento clave para la paz y el desarrollo.
Durante su estancia en la llamada Ciudad de la Luz dialogó con la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, y el ministro de Cultura francés, Franck Riester, y firmó un acuerdo de cooperación con su par búlgaro, Boil Banov, entre otras actividades.
El periplo de Alonso por el viejo continente continúa este sábado en el Reino Unido. (Tomado de PL)
