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Foto: CadenagramonteFoto: CadenagramonteLa Habana, 26 jul.- La Asociación de Técnicos Azucareros de Cuba (ATAC) instó a sus más de 10 mil 500 integrantes al análisis de los principales problemas que entorpecieron la zafra anterior, y a la búsqueda de soluciones para la próxima que debe comenzar en noviembre.

Es imprescindible que las filiales provinciales y órganos de base examinen los planteamientos fundamentales realizados en los activos técnicos de junio y julio pasados, propuso Eduardo Lamadrid Martínez, presidente de la ATAC, en carta dirigida a sus directivos territoriales.    

Sugirió que las propuestas deben estar encaminadas a lo que se puede hacer en el centro de trabajo, aunque también a las que hay que dar seguimiento o a gestiones de organismos superiores, y que en los encuentros respectivos no se deje de recoger ninguna de ellas.

Otro objetivo consiste en que los técnicos jóvenes expresen sus criterios, lo cual ayuda a su formación y a su sentido de pertenencia al sector, argumentó Lamadrid Martínez, quien recordó que se trata de poner en práctica uno de los acuerdos de su más reciente reunión ejecutiva. 

Los activos tuvieron lugar en agrupaciones de la agroindustria y empresas de apoyo, en coordinación  con el Grupo Azucarero AZCUBA y la participación, en la mayoría de los casos de los ingenios, especificó Lamadrid Martínez en sus declaraciones exclusivas a la Agencia Cubana de Noticias.   

Añadió  que la ATAC con sus asociados tiene un gran compromiso con la próxima zafra, con su participación activa en hacer que su voz sea receptiva por los directivos en el cumplimiento de las normativas, calidad de las reparaciones y trabajo coordinado en aras de que la eficiencia responda a los intereses del país.

En la relación de soluciones figuran mayor exigencia en la preparación de los suelos y otras labores, así como en el corte, elevación de la calidad de la materia prima entrada a fábrica, definición de áreas con tipos de máquinas, realización de molidas estables, garantía de piezas de repuestos de los autobasculantes, e introducción del sistema de capacitación antes del periodo de reparaciones.

Además, atención a los politécnicos azucareros para formar a los jóvenes que viven en los bateyes y asegurar el relevo de los de edad más avanzada, así como también el entrenamiento de los trabajadores, en los ingenios altamente automatizados, a fin de que sepan operar y no provocar paradas del proceso industrial en caso de fallos.

Igualmente la ATAC pide a sus delegaciones de base el apoyo al completamiento de las plantillas del personal de mantenimiento, organización de las brigadas por turno y atención priorizada a la reparación de los equipos de preparación de caña, que garanticen una alta extracción de jugo,

Salvo Pinar del Río, por no tener instalaciones agroazucareras, ascienden a 14 las filiales provinciales de esa asociación técnico-profesional, integrada de forma voluntaria por profesionales, técnicos de nivel medio, estudiantes, jubilados, así como obreros calificados.

Su objetivo principal es contribuir al desarrollo de entidades y comunidades del sector agroindustrial cañero-azucarero y de sus derivados, y en la actualidad posee 10 mil 530 asociados en 2915 organizaciones de base, según estadísticas oficiales.  

La ATAC es una de las organizaciones profesionales más antiguas del país porque su fundación data de 1927. (Cadenagramonte)