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Foto: CadenagramonteFoto: CadenagramonteHace algunos años que Cuba se encuentra inmersa en múltiples transformaciones económicas, con el fin de garantizar la supervivencia del modelo social que desde hace varias décadas defendemos y para adecuar el contexto cubano a los imperativos del mundo contemporáneo.

En ese proceso, al que se le ha denominado actualización del modelo económico, ocupan el mayor protagonismo los economistas y contadores, profesionales que hoy celebran su Día, en recordación al aniversario de la designación del Comandante Ernesto Guevara como ministro presidente del Banco Central de Cuba.

Ese sector se enfrenta actualmente a retos bien difíciles, pues los cambios que se generan en el país se basan en aspectos en los que jamás habíamos incursionado, de ahí la importancia de la labor que ellos tienen en la asesoría a aquellos que tienen la responsabilidad de llevar a la práctica las directrices teóricas.

Me refiero, por ejemplo, a la apertura a la inversión extranjera, el incremento del trabajo por cuenta propia y la creación de las cooperativas no agropecuarias en ámbitos como el comercio, la gastronomía y los servicios, en aras de mejorar la atención a los clientes y garantizar la solvencia de esas unidades.

Pero tampoco podemos olvidar la labor de los auditores, que sobre todo en los últimos años en nuestro país, han tenido un realce con la creación de la Contraloría General de la República y son fundamentales en la prevención de posibles hechos de corrupción e ilegalidades.

En la solución a esos problemas radican algunos de los objetivos de las transformaciones económicas que acontecen en todo el país, y de las cuales los profesionales de las ciencias afines son los hacedores fundamentales, por lo que no resulta difícil entonces valorar su labor. (Cadenagramonte)