Foto: Cadenagramonte.Ginebra, 15 jun.- La reducción de las disparidades entre hombres y mujeres en el universo laboral podría sumar 5,8 billones de dólares (millones de millones) a la economía mundial de aquí a 2025, señaló la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Pero ese potencial está lacerado por la desigualdad de género, que continúa siendo uno de los desafíos más apremiantes, estimó la (OIT), en un nuevo estudio sobre el tema.
En 2014 los líderes del Grupo de los 20 (G20) asumieron el compromiso de reducir la disparidad entre las tasas de participación laboral de los hombres y las mujeres en 25 por ciento para 2025.
Si ese objetivo se realizara a escala internacional, tendría el potencial de aportar 5,8 billones de dólares a la economía global y podría generar importantes aportes a las arcas públicas, valoró la agencia de Naciones Unidas.
De acuerdo con los cálculos, los ingresos fiscales mundiales podrían aumentar en 1,5 billones de dólares, la mayor parte en los países emergentes (990 mil millones) y en las naciones desarrolladas (530 mil millones).
África del norte, los estados árabes y Asia meridional recibirían los mayores beneficios, pues allí las disparidades en las tasas de participación entre los hombres y las mujeres superan los 50 puntos porcentuales, precisó el análisis.
Además de las ventajas económicas, incorporar a más mujeres al trabajo tendría un impacto positivo en su bienestar, evaluó el organismo.
La mitad de las mujeres están fuera del mercado de trabajo, pero el 58 % preferiría tener un empleo remunerado, ello denota la existencia de “importantes dificultades que están limitando sus capacidades y libertad de trabajar”, apuntó la directora general adjunta de políticas de la OIT, Deborah Greenfield.
A nivel global, la tasa de desempleo de las mujeres se sitúa en 6,2 por ciento en 2017, para una diferencia de 0,7 puntos porcentuales en relación con el índice de 5,5 por ciento en el caso de los hombres.
Para 2018, agregó la pesquisa, es de esperar que ambas tasas de desempleo permanezcan sin variaciones, manteniendo por lo tanto la brecha en su nivel actual, sin poder anticipar ningún progreso antes de 2021 en base a las tendencias actuales.
En opinión de la OIT, es preciso promover la igualdad de remuneración para trabajo de igual valor y abordar las causas profundas de la segregación profesional y sectorial, reconocer, reducir y redistribuir el trabajo de cuidado no remunerado, y transformar las instituciones para prevenir y eliminar la discriminación, la violencia y el acoso.(Cadenagramonte)
