Sierra de Cubitas, 8 oct.- María del Carmen Mora Aguilera es una de esas féminas que ante las adversidades busca motivaciones para engrandecer el espíritu y la confianza en su Revolución que para ella significa el instrumento más valioso para enfrentar de estos tiempos difíciles tras el paso del huracán Irma.
Vive en Las Mandarinas, una circunscripción del Consejo Popular La Gloria, en Sierra de Cubitas, donde el fenómeno meteorológico arrasó con todo, hasta con su humilde casa, razón suficiente para estar triste, sin embargo, nos recibe con cara de quien guarda un tesoro.
Para ella, no hay tarea difícil cuando la mujer pone su mano; como presidenta del Comité de Defensa de la Revolución (CDR), de esta zona, siempre está presente en cada acción que allí se desarrolla.
La llegada del proyecto cultural comunitario Voluntad de corazones de la Brigada de Instructores de Arte José Martí le devolvió el palpitar a su corazón y la sonrisa de su rostro se hizo visible.
“Esto que están haciendo por nosotros es una cosa maravillosa que ha hecho la Revolución, alegrar nuestros corazones, lo necesitamos para seguir trabajando, estoy agradecida, me siento protegida, nunca voy a tener conque pagar a tanta gente buena,” expresó la cubiteña.
Motivada ante el espectáculo que ofrecieron los jóvenes artistas recitó una poesía dedicada a Vilma Espín, que según ella la aprendió de su abuelita cuando era apenas una niña.
La firmeza heredada de Vilma, la alegría de Celia y la confianza en Fidel han sido para María del Carmen Mora la fórmula perfecta en estos tiempos tan difíciles, donde hacen falta grandes mujeres capaces de hacer grandes hazañas.