Sierra de Cubitas, 11 nov. – La belleza y el esplendor de los árboles en estas tierras rojas al norte de la provincia de Camagüey fueron arrebatados por la implacable furia del huracán Irma hace exactamente dos meses y tres días.
Una y otra vez todos formulamos la misma interrogante, ¿cuándo volverán las flores a adornar los jardines? Parecía imposible la respuesta, pero es precisamente ante estas circunstancias que se reconoce el poder de la naturaleza, unas veces furiosa y otras bondadosa.
La lluvia como si fuera cómplice de ella llegó una y otra vez apacible para dejar sobre las plantas la magia que las obliga a crecer sanas y vigorosas, como las percibo en mi propio jardín del cual le muestro algunas especies.
Yo diría que a modo de consuelo o solidaridad, lo hizo para reparar el daño y trajo a las laboriosas abejas como criaturas prodigiosas para trasladar el néctar de un lugar a otro y regar el aroma de cada especie.
Es una deuda bien saldada, porque ahora cada mañana aparece una nueva flor para dejar la belleza necesaria y adornar el paso de quienes con buena voluntad se recuperan poniendo a cada acción las manos y el corazón.
Camapana.
Enredadera casera.
Enrredadera.
Flor de la pera china.
Girasolillo.
Manitos de la Reina.
Margarita roja.
Corona de Cristo.