Foto: AutoraSierra de Cubitas, 5 marz.- Reforzar la unidad más allá de las diferencias que nos separan, en aras de luchar por un futuro mejor para la región latinoamericana, surgió por iniciativa del Comandante en Jefe Fidel Castro y del dirigente venezolano Hugo Chávez.
En ese andar en pro de la unidad latinoamericana rubrican el 14 de diciembre del 2004 en La Habana la Declaración Conjunta para la creación de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA). Consolidando de esa manera el ideario de Bolivar y Martí.
Fidel Castro Ruz, el eterno líder de la Revolución Cubana, concibió al ALBA como un instrumento para desarrollar bases de cooperación mutua y complementación política, social y económica para los países de América Latina y el Caribe.
Entre sus más visibles y humanos frutos está el envío de brigadas médicas a los lugares más intrincados de la geografía latinoamericana en la gran mayoría de los casos, a familias humildes abandonadas totalmente y sin acceso a asistencia médica. La Operación Milagro que ha devuelto la visión a millones de personas, gratuitamente.
Así como la radicalización del analfabetismo en Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Ecuador, mediante el programa cubano «Yo sí puedo», traducido a varios idiomas, son de las mayores conquistas sociales de integración regional del ALBA.
Estados Unidos y su plan de magnicidio con varios atentados fracasados contra el presidente venezolano Nicolás Maduro, práctica añeja de la OEA y la CIA, muy conocida en el continente, seguimos avanzando y abriéndonos paso en la región como está demostrando México y como lo siguen haciendo Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua, a cuyas revoluciones no han podido vencer a pesar de la despiadada agresión y bloqueos a que son sometidas.