Foto: CadenagramonteNaciones Unidas, 31 oct.- La vicecanciller y embajadora de Nicaragua ante la ONU, María Rubiales, afirmó aquí que su país está firme junto al Gobierno y pueblo cubanos en la lucha contra el bloqueo de Estados Unidos.
“Nicaragua está en pie de lucha, en la batalla para terminar un bloqueo criminal e ilegal. Como ha dicho el presidente Daniel Ortega, siempre defenderemos a nuestros hermanos inclaudicables y a su Revolución socialista”, declaró a Prensa Latina, a solo 48 horas de una nueva votación en la Asamblea General sobre un proyecto de resolución que demanda el fin del cerco a la isla.
La diplomática aseguró no tener dudas de que el mundo reiterará el miércoles en la Asamblea su repudio a las sanciones económicas, comerciales y financieras aplicadas por Washington durante más de medio siglo, que el año pasado recibieron el rechazo de 191 de los 193 Estados miembros de la ONU.
Tenemos gran confianza en la comunidad internacional y en su apoyo a Cuba hasta lograr el levantamiento del bloqueo, subrayó.
De acuerdo con Rubiales, el cerco mantenido por las últimas 11 administraciones en la Casa Blanca constituye una medida injusta e inexplicable en pleno siglo XXI por su impacto humano y extraterritorial.
“Afecta al pueblo cubano, a muchos en el mundo y también a los ciudadanos de Estados Unidos y las empresas de ese país que quieren hacer negocios con la isla”, denunció.
La representante permanente de Nicaragua ante las Naciones Unidas, insistió en la naturaleza criminal de las sanciones económicas, comerciales y financieras contra la mayor de las Antillas.
Cuba cuenta y contará con nosotros, ahora en la lucha contra el bloqueo y siempre, porque constituye un faro de libertad que ilumina el camino de los pueblos, advirtió.
Rubiales cuestionó a la actual administración, encabezada por el presidente Donald Trump, por su empeño en recrudecer el bloqueo y apelar a la hostilidad, revirtiendo los avances alcanzados en los últimos dos años del gobierno de Barack Obama, en los que se dieron pasos hacia la normalización de los vínculos entre La Habana y Washington y para modificar el cerco.
Trump anunció en junio pasado su decisión de desmontar los progresos de las relaciones bilaterales y en particular de fortalecer el bloqueo. (Cadenagramonte)
