Foto: CadenagramonteMoscú, 13 oct.- El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, denunció los intentos de Estados Unidos de crear un enclave independiente en la orilla oriental del río Éufrates y obstaculizar así la paz en Siria.
Lavrov descartó este viernes las afirmaciones de que la provincia de Idleb sea la única región problemática que queda en el territorio de ese país levantino.
“En la parte oriental del río Éufrates se encuentran grandes extensiones de tierra, donde ocurren cosas totalmente inaceptables”, denunció el jefe de la diplomacia rusa.
Washington busca crear en esa zona, sobre todo a través de sus aliados como el caso de los kurdos, una especie de Estado, donde sus protegidos posean todas las condiciones para la vida, declaró.
Ellos forman órganos alternativos de poder en esas regiones y condiciones para el regreso o separación de los refugiados, según el caso, comentó.
Sin embargo, en las zonas controladas por el Ejército sirio, ni Estados Unidos, ni Francia u otras naciones occidentales participan en las tareas de reconstrucción de la nación levantina o crean condiciones para el regreso de desplazados, afirmó.
La ausencia de estos países en la recuperación de Siria se explica en Occidente por la supuesta falta de un proceso político creíble, aunque esa condición no parece ser necesaria en el plan desarrollado por Washington al este del Éufrates, apuntó.
Estados Unidos intenta la formación de una autonomía que significaría la división de Siria, en una maniobra por mantener inestable la situación en ese país, señaló Lavrov.
Damasco solicitó en 2015 el apoyo de la aviación de combate rusa para enfrentar a movimientos terroristas, cuyos remanentes se concentran ahora en la provincia de Idleb. (Cadenagramonte)