Mayo, 2021.- Salvador Torres, es un hombre que dedicó toda su vida a la noble labor de enseñar. Las aulas fueron siempre el escenario donde más tiempo estuvo cada día, pero la jubilación cambió su vida y también lo hizo cambiar, ahora piensa en enseñar, pero también en sembrar su pedacito de tierra.
Recién incorporado como jefe de grupo del Centro de diagnóstico y orientación en la comunidad Cubitas, aporta cada uno de sus conocimientos en ambas disciplinas, se siente útil y con mucha fuerza para continuar ofreciendo sus experiencias.
Desde el edificio 11 en la comunidad Cubitas, donde hace varios años es presidente de un CDR, impulsa las tareas del barrio, pero también dedica las horas libres al cultivo de las plantas medicinales las que se extienden por todo el patio.
El chayote una hortaliza de mucha demanda, pero que se cultiva poco en esta zona del Camagüey está entre las plantas que siembra Salvador, el aguacate y las guanábanas pululan allí también como las frutas predilectas de la demarcación de este educador.
Como él mismo expresó…” Quiero, siempre desde el lugar que ocupaba en las aulas enseñar a mis alumnos sobre la necesidad de sembrar para incrementar las ofertas en el plato de los cubanos, la COVID-19 impuso nuevos retos, y tenemos que marchar a la par de este momento histórico que estamos viviendo, la tierra de esta zona es fértil, aunque ahora las siembras sufren la intensa sequía ya vendrán las lluvias, pero hay que seguir sembrando, no podemos cansarnos”. (Fotos: Autora)
