Foto: AutoraDiciembre, 2021.- Formar parte de la reserva de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), ayudar a formar a las nuevas generaciones y continuar el legado del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, desde su puesto de trabajo es para el Capitán, Esidel Collado López, funcionario de Control Militar en este territorio, un honor.
"Pertenecer a las FAR es un orgullo para todo cubano y en especial para nosotros que estamos en ello es la tarea más importante, así como preparar a las unidades y al resto de los trabajadores, en el plano personal me ha ayudado a formarme como persona, mi carácter, organización”, expresó quien lleva más de trece años al servicio del país.
“El líder de la Revolución cubana le dejó a las FAR, una gran tarea, la de cuidar al pueblo, el hombre del Granma que puso su vida en función de Cuba, poder mantener vivo su historia sus enseñanzas, trasmitiendo mis conocimientos a los pinos nuevos es para mí una gran satisfacción, durante los 62 años de Revolución su legado ha sido imperecedero”, dijo.
Para este consagrado revolucionario la etapa de COVID-19 marcó un antes y un después en su carrera militar pues su laborcomenzó en La Habana y en las cabeceras municipales de todo el país, utilizando los medios de las fuerzas armadas para fumigar las calles que estaban cerradas por grandes eventos de transmisión del nuevo coronavirus, también se apoyaron las labores de distribución de los alimentos de donación, y de oxígeno medicinal.
Esidel Collado López quién ha dedicado gran parte de su vida, a la defensa de la patria, poder brindar sus conocimientos y preparar a los nuevos cuadros para ocuparse del cuidado de la Revolución es una tarea que cumple con orgullo dando siempre el paso al frente y llevando a Cuba en su pecho.
