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La Habana, 9 ene.- Con un centenar de protagonistas en el trayecto desde el municipio del Cotorro hasta Ciudad Libertad, se reeditó este martes la entrada triunfal del Comandante en Jefe a La Habana, al frente de la Caravana de la Libertad, hace 60 años.  

En esta ocasión, los cien caravanistas eran jóvenes trabajadores de diferentes sectores del país, estudiantes de distintas enseñanzas y un grupo de veteranos, miembros de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC), entre los cuales destacaba la presencia de la General de Brigada Delsa Esther Puebla Viltre, más conocida por el cariñoso apelativo de Teté Puebla.

A lo largo del recorrido, y respetando las pautas de la Caravana de la Libertad original, tuvieron lugar varios actos político-culturales, con destaque para el acaecido en el Museo de la Revolución, donde cien estudiantes recibieron el carnet de la Unión de Jóvenes Comunistas; asimismo, en los balcones del ICRT la Caravana hizo un alto para presenciar una pequeña gala cartística y sentir el calor de la Avenida 23, casi tan populosa como 60 años atrás.

Luego, los jóvenes de hoy, continuadores de ese legado, llegaron a Ciudad Libertad, desde donde, hace seis décadas, Fidel Castro expresó: “He aquí nuestra más fina columna, nuestra mejor tropa, la única tropa que es capaz de ganar sola la guerra. ¡Esa tropa es el pueblo!”.

Por ello, en representación de todo el pueblo de Cuba, cinco mil capitalinos se dieron cita en el que fuera el campamento militar Columbia, convertido luego en Ciudad Escolar Libertad, para recordar lo sucedido en 1959.

En el acto estuvieron presentes Miguel Díaz-Canel Bermúdez, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; José Ramón Machado Ventura, segundo secretario de Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC); protagonistas de la Caravana, combatientes del Ejército Rebelde y familiares de los caídos, entre otros.

“La entrada triunfal de Fidel a La Habana simboliza el júbilo, la esperanza en el rostro de generaciones sumidas en el oprobio y el compromiso con la naciente Revolución”, expresó Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del PCC en la capital.

El ejemplo de estos hombres a quienes la Historia unió en estatura política, militar, social, en fuerza y convicción revolucionaria a Fidel, enaltece los más genuinos valores por los que entregaron su vida al servicio de la Patria. ”Perpetuar su legado y enriquecer su obra es el mejor regalo que podemos hacerle los cubanos agradecidos”, afirmó. (Radio Cadena Agramonte)